Cuando los niños de la guerra nos reunimos hablamos en un nuevo idioma, mitad ruso, mitad español. Por ejemplo, si en ruso "patinar sobre hielo" se dice "katatsia na konkaj", nosotros decimos "konkiar". Cambiamos las palabras a la manera rusa. Mi hijo vive en Moscú, pero mis nietos están aquí. Hablan en ruso por así decirlo, al nivel de andar por casa y solo pueden leer textos impresos, pero no los escritos a mano.